A veces, hablando con gente que trabaja en los ámbitos del tiempo libre y/o la juventud, tenemos siempre presente que Castro es un sitio duro para hacer actividades. Porque puede pasarte fácilmente que te pases varios días preparando una actividad a la que luego no viene nadie o casi nadie. Esto mismo sucedió el pasado viernes con Wish Tree, la actividad que tenía preparada, a la que solo acudió una persona.
Solo vino Vlad, que ya había asistido hace meses a alguna de nuestras charlas sobre La otra hodina h, interculturalidad, y proyectos europeos. Por lo tanto, no se pudo realizar la actividad Wish Tree, pero pasamos casi media hora charlando sobre proyectos europeos, las últimas actividades de nuestra asociación, futuros proyectos e ideas, etc.
Al final, la tarde de viernes fue un cielo de nubes y claros. Nubes porque es una lástima prepararse una actividad a la que no viene casi nadie. Y claros, porque Vlad está interesado en algunas de las actividades de nuestra asociación, y parece ser que incluso se anima a viajar a París en Abril para el próximo seminario Team Spirit.
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